Cuando ocurren desperfectos en zonas comunes de la comunidad de vecinos, es responsabilidad de la comunidad solucionarlos. Pero, ¿qué hacer si la comunidad no quiere llevar a cabo las reparaciones necesarias? En primer lugar, se debe informar al presidente o administrador de la comunidad y, si esto no funciona, se pueden tomar medidas como pagar uno mismo por la reparación y luego reclamar el coste a la comunidad o presentar una denuncia. Es importante conocer la Ley de Propiedad Horizontal y sus obligaciones para tomar las decisiones adecuadas.
En ocasiones, la comunidad de vecinos puede negarse a reparar los desperfectos en zonas comunes, lo que puede generar molestias e inconvenientes a los propietarios. En estos casos, existen distintas opciones que se pueden tomar para resolver la situación. A continuación vamos a ver diferentes formas de actuar si nos encontramos en esta situación.
Lo primero que se debe hacer es informar al presidente o administrador de la comunidad acerca de los desperfectos. Esto se puede hacer por medio de una comunicación escrita, en la que se especifiquen de manera detallada los daños y se solicite su reparación en un plazo determinado. Si la comunidad cuenta con un libro de actas, también se puede hacer allí la exposición de la situación. En cualquier caso, es importante que esta comunicación se haga por escrito, para que quede constancia de la petición por parte del propietario afectado.
En caso de que la comunidad no haya dado respuesta al escrito de informe enviado al presidente o administrador, se puede enviar un nuevo escrito solicitando la reparación de los desperfectos, pero esta vez, haciéndolo a través de un burofax o enviándolo en mano con acuse de recibo. De esta manera, se tendrá una prueba fehaciente de que la comunidad ha recibido la petición, lo que otorga seguridad jurídica al propietario afectado.
En caso de que la comunidad siga sin responder y los desperfectos supongan un problema que no puede ser ignorado, el propietario afectado puede optar por realizar la reparación él mismo y luego reclamar los gastos a la comunidad. Para ello, es importante guardar la factura de la reparación y presentarla junto con una denuncia en caso de que la comunidad no quiera hacerse responsable de los costes.
Es fundamental tener en cuenta la Ley de Propiedad Horizontal y sus obligaciones en caso de que la comunidad de vecinos no quiera arreglar los desperfectos en zonas comunes. El artículo 10 de esta ley establece la necesidad de realizar mejoras en la conservación y el mantenimiento del inmueble.
El artículo 10 de la Ley de Propiedad Horizontal establece que todos los propietarios tienen el deber de conservar y mantener tanto sus propias viviendas como las zonas comunes en buen estado. Asimismo, este artículo señala que se deben realizar las mejoras necesarias para el correcto mantenimiento y conservación del inmueble.
Es importante conocer cuáles son las reparaciones obligatorias en una comunidad de vecinos y diferenciar entre las que son consideradas urgentes y las que son obras de mantenimiento y mejora. Las reparaciones urgentes son aquellas que, de no realizarse de forma inmediata, pueden dar lugar a daños graves o irreparables en el edificio.
La comunidad tiene la obligación de reparar todos los elementos comunes del edificio, como puede ser una escalera, el portal o elementos estructurales, y su mantenimiento correrá a cargo de los propietarios según la cuota que corresponda a cada uno de ellos. En situaciones en las que hay propietarios que no estén conformes con la reparación, no están obligados a pagar en ciertas situaciones como, por ejemplo, cuando los daños son consecuencia de la falta de conservación o deficiente mantenimiento de los elementos comunes.
Si la comunidad no responde ante nuestras reclamaciones, es necesario tomar medidas más drásticas para lograr que se reparen los desperfectos en zonas comunes. En esta sección se explican las opciones disponibles para hacer frente a esta situación.
En primer lugar, se debe hacer constar el problema de forma escrita en la junta de propietarios, acompañando la documentación correspondiente si la hubiera. Es importante exigir medidas para que la comunidad valore la gravedad del problema y adopten una solución.
En esta junta se discutirán las reclamaciones y se tomarán decisiones en cuanto a las medidas a tomar para resolver los problemas de la comunidad. Es posible que en esta reunión se llegue a un acuerdo y se resuelva el problema, pero si no es el caso, hay que seguir buscando una solución.
Si la comunidad no toma medidas tras la junta de propietarios, es posible presentar una demanda en el juzgado. En esta demanda se solicitará una orden judicial de reparación o responsabilidad para la comunidad debido a la falta de actuación ante el problema.
Es importante contar con la documentación necesaria y con pruebas que acrediten la situación para poder hacer frente a la demanda. Si se consigue la sentencia favorable, la comunidad deberá hacer frente a los gastos de reparación de manera inmediata.
Si no se reciben respuestas tras los procedimientos anteriores, es posible realizar la reparación por cuenta propia y reclamar después el importe a la comunidad. Para que este proceso sea efectivo, es necesario seguir los siguientes pasos:
En caso de que la comunidad no pague o no responda a la reclamación, se puede seguir los mismos pasos descritos en la segunda opción y presentar una demanda en el juzgado.
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